Distribuir alimentos calientes, con temperaturas por encima de los 65°C, conlleva sus propios retos:
- Conservar la temperatura reglamentaria de 65°C durante largos trayectos.
- En el caso de servicios grandes, el adelanto de la producción.
- Adaptarse a las diferentes dietas que puedan tener los comensales, lo que significa mantener alimentos con distintas características a una misma temperatura.
El verdadero reto para las compañías son los platos fuertes, sobre todo cuando los platillos tienen que aguantar largas distancias.
Algunas buenas prácticas recomendadas son:
- Envasar las comidas directamente de marmitas y hornos para garantizar al máximo la temperatura deseada.
- Asegurar el correcto empaquetado de los alimentos, verificando que no haya aberturas que puedan liberar el calor.
- Contar con un armario caliente de alta temperatura para conservar los alimentos. Debe tener un rango de aproximadamente 120°C.
Al igual que otras grandes empresas del sector, Abadi Distribución de Alimentos cuenta con tecnología de alta gama para preservar los alimentos en buen estado.