Los conflictos entre trabajadores desencadenan serios problemas de comunicación y perjudican a la empresa y su funcionamiento laboral. La mediación es necesaria para resolver conflictos, además de que mejora y favorece la relación entre empleados.
Es importante disponer de un mediador neutral e imparcial, que ayude a que dos o más colaboradores con ideas distintas puedan llegar a un acuerdo.
Las características de la mediación laboral son:
- Confidencialidad: Todo lo expuesto se recoge por escrito y los acuerdos son privados.
- Flexibilidad: Los acuerdos se adaptan a las necesidades de las partes y facilitan la comunicación entre todos. La duración de las sesiones debe ser de 1 hora aproximadamente.
- Tiempo: La mediación es un proceso que puede concluir en semanas o meses.
- Menor coste: Las partes en desacuerdo cubren el proceso económico al 50%, lo que genera menor coste por parte de la empresa.